Una profecía. Un coche tuneado a modo de máquina del tiempo. Era el 26 de octubre de 1985. hace ya 30 años que el DeLorean DMC-12, se hizo clásico. William T. Collins y John DeLorean fabricaron en Irlanda un automóvil solo entre 1981 y 1982. De conepción americana, diseño de Lotus y motores Volvo, Peugeot y Renault. Una estética actual. con carrocería de acero inoxidable, chasisde última tecnología y puertas ala de gaviota. Pensado para el mercado EEUU, tuvo un generoso número de fans, aunque adolecía de una costosa producción. La puntilla la dieron las leyes de anticontaminación, que desinflaron la potencia y elevaron el consumo. Los números no cuadraban y la compañía, a punto de quebrar, recibe la
noticia que acaba por derrumbarlo tod: John DeLorean, es arrestado por el FBI por tráfico de drogas. Finalmente, el 24 de diciembre de 1982 sale de las factorías el, oficialmente, último de ellos.
Y la trilogía de películas que lo impulsó a la fama fue Regreso al futuro I, II y III. Un guión original rechazado hasta 40 veces, para finalmente ser la más taquillera del año. Toda una premonición automovilística, pero muchos de los inventos de R.Zemeckis (guionista y director de la trilogía) se han hecho realidad. Drones que graban imágenes para las notícias, gafas para hacer videollamadas, hologramas, ropa inteligente, prismáticos digitales, televisores planos con multitud de canales en televisión,
compras por internet, huellas digitales para abrir puertas, biocombustible...Otros, en camino, o aún en el tintero: Nike Mag, las zapatillas de deporte que se ajustan solas; coches y
patines voladores, control total del clima, barras de neón en los bordes
de la carretera, reciclado de residuos orgánicos para producir energía.
Aunque, a la vista de los acontecimientos, no sale tan mal parado. Y es que otros grandes títulos de ciencia ficción, como son Metrópolis, 1984, Fahrenheit 451, 2001: una Odisea Espacial... tampoco acertaron.
